Como escenario o personaje, la Ciudad de México ofrece lecturas inagotables. Cinco autores clásico se apropian de las metrópolis y nos regresan diferentes versiones de su expansivo entramado urbano. Como el libro de Elena Poniatowska "Todo empezó el domingo", terminada de la mano del dibujante Alberto Beltrán, la colección de relato -estampas de una sociedad que sobrevive en la nostalgia- revela el carácter de barrios como Chapultepec, San Ángel y Xochimilco.
"Palinuro de México" de Fernando del Paso, el ganador del Premio Cervantes 2015, se sirve de un lenguaje libre e irreverente y fiel al habla de los habitantes para construir un libro tan dinámico, lúdico y desbordante como la Ciudad de México. Finalmente en la novela "De perfil" de José Agustín, donde la urbe es un reflejo del joven Rodolfo Valembrando, quien en su paseo por la Ciudad Universitaria y al Colonia Narvarte se prepara para el futuro.